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El aceite IngreVita™, un nuevo aditivo de omega 3 de Cargill, ayuda a los clientes a agregar ácidos grasos a sus productos de alimentos y bebidas.

Cumplir los deseos de los consumidores de una mayor cantidad de omega 3 

El aceite IngreVita™ ofrece una nueva solución para que los fabricantes de alimentos y bebidas puedan agregar ácidos grasos esenciales a sus productos. 

January 01, 2015

Los ácidos grasos omega 3 de cadena larga, llamados comúnmente EPA o DHA, son esenciales para la salud de las personas. Brindan una gran variedad de beneficios, desde el desarrollo sano del cerebro y la reducción de la inflamación a la disminución del riesgo de enfermedades cardíacas. Pero el cuerpo humano no produce estos ácidos grasos por sí mismo. Los EPA y DHA deben complementarse a través de alimentos ricos en ácidos grasos omega 3.

Según las investigaciones, la mayoría de las personas en Norteamérica no reciben cantidades adecuadas de EPA y DHA de sus dietas, pero la demanda de estos ácidos está en aumento.

“Los consumidores manifiestan que buscan más nutrición de los alimentos que compran y hay una mayor conciencia de los beneficios de los ácidos omega 3”.
— Kristine Sanschagrin, gerente de comercialización, Cargill Specialty Seeds & Oils

La investigación Fatitudes™ de Cargill, un estudio anual realizado por la compañía en 2014, exploraba la manera en la que los consumidores reaccionaban a los aceites y las grasas en los alimentos envasados. Se descubrió que por lo menos el 98 % de los consumidores había escuchado hablar de los ácidos omega 3 y una creciente cantidad de ellos tienden a comprar productos cuyas publicidades los mencionan como ingredientes.

Para ayudar a sus clientes a integrar los ácidos grasos a sus productos, Cargill se dedicó a desarrollar un nuevo ingrediente. En 2014, presentó IngreVita™, una mezcla de aceite de canola alto oleico, aceite de pescado y antioxidantes exclusivos que puede agregarse a una gran cantidad de alimentos y bebidas. Era el primer aceite de pescado estabilizado que ofrecía una fácil formulación, y estaba diseñado para reemplazar una cantidad del aceite usado en la receta de los productos. Además, ofrecía un impacto mínimo o nulo en el sabor y un precio relativamente bajo. Ahora, los fabricantes pueden incorporar IngreVita sin problemas a sus productos, ofreciéndoles a los consumidores alimentos con mayores cantidades de ácidos omega 3.

En 2015, se lanzó un segundo producto de la familia IngreVita. El aceite de girasol IngreVita, una fórmula sin organismos genéticamente modificados (sin OGM), ofrecía una mezcla similar de aceite de pescado y antioxidantes exclusivos. Desde sus lanzamientos, las dos mezclas IngreVita han tenido una respuesta muy positiva, ofreciéndoles a los clientes una oportunidad de mejorar la nutrición de sus marcas y, como consecuencia, enriquecer las vidas y las dietas de los consumidores.